La familia de talanqueras de madera tratada incluye las vallas que utilizando postes de sección circular o cuadrada forman barandillas con traveseros en diagonal, de manera que se obtienen bonitas estructuras lineales de cercados tipo cenefa. Son vallados que se utilizan principalmente en caminos naturales en los que se requiere poner en valor un espacio a la vez que dar seguridad a los visitantes. Cuando seleccionamos una talanquera hemos de considerar que no es discreta (su impacto es importante por la cantidad de material utilizado) y que además su montaje es costoso.

Todas las talanqueras de madera disponen de un travesaño superior horizontal que forma el pasamanos. Las más simples, llevan un poste entre pilares dispuesto en diagonal con o sin otro travesero horizontal inferior. Las más sofisticadas en lugar de un poste de madera en diagonal, llevan dos postes que forman una cruz de San Andrés, con o sin otro travesero horizontal inferior (rodapiés).

La valla Palamós, es una de nuestras talanqueras favoritas y es de las pocas que hemos bautizado con nombre propio. Es una valla construida con madera aserrada con pasamanos, cruz de San Andrés y rodapié. Esta valla de madera se adapta muy bien en entornos naturales algo urbanizados, como paseos marítimos, parques urbanos, incluso en jardines.

Un caso especial de talanquera, es la talanquera de barrotes. Este modelo dispone, entre los traveseros horizontales, pequeños barrotes verticales perfectamente encajados. La talanquera de barrotes es una valla de aspecto muy sólido i también con un importante impacto visual

En la familia de talanqueras de Fitor-vallas os ofrecemos las variantes más habituales que podemos encontrar en nuestro territorio. Pero si vuestro diseño no coincide con los que os proponemos, no dudéis en consultarnos.