Palos de eucalipto. Origen y tratamiento.

Los palos de eucalipto suministrados por Fitor Forestal son de la especie Eucalyptus globulus, árbol de origen australiano introducido en la península para su aprovechamiento industrial, básicamente para la producción de pasta de papel.

El eucalipto, tras la corta, rebrota de varios vástagos. Para el correcto crecimiento de la planta futura, la mayoría de estos vástagos deben eliminarse. En Fitor, damos un nuevo uso a esta madera joven procedente de la selección de brotes.

Cortamos los brotes con diámetros entre 3 i 8cm obteniendo palos de hasta 5m. Los palos se descortezan manualmente en el monte y se secan de forma natural al aire libre. Una vez secos, los palos de eucalipto se tratan mediante autoclave con sales incoloras para alcanzar una clase de riesgo 3. De esta forma obtenemos unos bonitos palos muy duraderos incluso en el exterior.

Palos de eucalipto. Origen y tratamiento.

Los palos de eucalipto, utilizados bajo techo conservan su característico color blanco, si se usan en construcciones de exterior, con el tiempo se vuelven grises.

Opcionalmente, los palos, podemos acabarlos con pinturas o lasures, con finalidades puramente estéticas, pues su tratamiento en autoclave nos asegura la impregnación profunda de la madera con sales orgánicas biocidas, garantizando una larga vida útil de las construcciones.

Los palos de madera de eucalipto presentan una cierta conicidad, y una vez descortezados, conservan todas las irregularidades de su natural crecimiento, obteniendo con ello un producto con un encanto excepcional.

Los palos de eucalipto los vemos en cubiertas de pérgolas y cobertizos, para dar sombra a sus afortunados usuarios. En terrazas podemos utilizarlos para separar espacios. En paisajismo podemos crear espacios singulares. Podemos usarlos en fachadas y paredes para ambientar espacios. ¡Las aplicaciones de los palos son tantas como lo permita nuestra creatividad!